Una de las experiencias mas maravillosas de mi vida ha sido este primer reto, salí en solitario desde Roncesvalles un 7 de Septiembre de 2014 y trás 12 días de camino y más de 800 kms llegué a Santiago de Compostela el día 18 de Septiembre.
Pese a las inclemencias del tiempo que se presentaron, el cansancio, el peso de las alforjas, averías y demás hechos que sucedieron, mereció la pena y mucho, conocí a gente maravillosa en este viaje, gente con la que compartí muchos momentos que llenaron mis momentos de soledad y de bajo estado de ánimos, gente con la que compartí «el camino» día a día.
Desde aquí también quiero dar las gracias a todas esas personas que se interesaron por mi en algún momento de mi viaje con una simple llamada o mensaje de ánimo, dar también las gracias a los que cada mañana en cada comienzo de etapa eran mi fuerza moral para seguir adelante.
A esas personas de la asociación que estuvieron siempre apoyando el reto y creyendo en él como fué Barbara Larrañaga y Rafael Perez, a ellos mil gracias.
A Monica Cereijo por su dedicación y esfuerzo con el reto, por compartir las publicaciones, por su mensajes y llamadas y sobre todo por estar el día de la llegada a Santiago y esperar con la que caía aquel día.

Y sobre todo a mi familia, por estar en Santiago de Compostela el día que llegué, eso no lo olvidaré nunca, el ver a mi hija correr bajo la lluvia y salir en mi busca se me ha quedado grabado en la retina. A mi madre por sus abrazos que sin decir nada lo han dicho todo, a mi hermana por creer en mi como siempre lo ha hecho, a mi mujer por su apoyo y sus palabras de ánimo desde que conoció esta iniciativa y a mis hermanos por esas palabras que me reconfortaron tanto.